martes, 23 de agosto de 2011

UNA OPORTUNIDAD..

Y así murió... viendo pasar oportunidades.
Imagina que estás frente a una oportunidad, la que sea. La tienes frente a tí...
1.- Un nuevo trabajo, en otra ciudad, con otra gente.
2.- El momento justo de hablar en serio con tu amiga, novio(a),  jefe, vecino.
3.- La ocasión para pedir perdón.
4.- Comprar una casa a tus posibilidades y gustos.
5.- Descansar y no contestar tu teléfono (¡2 horas!)
6.- Viajar con tus amigas (os).
7.- Volver a amar. 
8.- Dejar lo que te molesta y cambiar de vida.
9.- Estudiar una maestría.
10.- X
Creo que hay dos formas de ver las oportunidades:
1. Como algo que no necesitas porque te mueve tu zona de confort y mas vale malo por conocido que bueno por conocer.
ó
2. Como algo que puedes necesitar, querer, anhelar desde hace mucho tiempo y no te has atrevido a hacerlo porque implica trabajo. 
No hay mucho que pensar. Sabemos si es buena o mala oportunidad y sólo se dice SI o NO. Lo curioso es que, aunque las oportunidades casi siempre las buscamos, también llegan a la puerta y somos tan orgullosos que a veces ni las volteamos a ver. Hoy me puse a pensar cuales he dejado ir y cuales he decidido tomar el riesgo y es que, todos los días nos enfrentamos a una. 
¿Se vuelve a tener la misma oportunidad? Esa es la pérdida real: Para volver a tener una oportunidad IGUAL, tendríamos que vivir en el mismo momento, día, hora, lugar, años.. ¿difícil no? Imposible. ¿Porque ver que sólo pasan y  a nosotros nos pasa el tiempo?
La próxima vez, piensa si es un hecho cualquiera o una oportunidad. Por lo menos te quedarás con la tranquilidad que la volteaste a ver, aunque le hayas dicho que no. (No se aceptan remordimientos después)
OVV

1 comentario:

  1. las "oportunidades" están en cada momento de nuestros dias, en el instante en que volteas a ver algo o alguien (sin pensarlo, pero te diste la oportunidad de hacerlo) pero quien dice: ¿voy a darme la oportunidad?, por lo que viví y por lo que he pasado, siempre fue cuando las cosas no nos iban bien, cuando sufri un fracaso, cuando vi mi novio con otra mujer, cuando mis padres me hicieron sentir la peor de todas; cuando eso sucedió es que vi las oportunidades en todo momento, mas no cuando era feliz, cuando era exitosa en mi trabajo, cuando tuvimos a nuestro segundo bebe.
    Me siento feliz de haberme dado la oportunidad de no renunciar lo que con mucho esfuerzo construí, aun con sus tormentas; pero nunca abandone, nunca fui desleal ni infiel, de eso me siento orgullosa, porque nunca fui como ellos, los que siempre me hicieron la vida imposible.
    A mis 50 siento que soy una mujer completa, me sucedió todo lo bueno y también todo lo malo y estoy aqui y seguire aquí. amen

    ResponderEliminar